martes, 28 de mayo de 2013

El avión

El avión

Ignoro como me deje convencer, para aquel viaje, dado que jamás me intereso visitar Israel; no tiene para mí sentido, cuando lo que hay allí son, simplemente recuerdos.
Pero el caso, es que acepte, hacer la visita a Tierra Santa
Cada vez que subo a un avión; paso por una especie de experiencia traumática; y aquella vez, no fue distinto. Recuerdo que nos hallábamos ya a punto de tomar tierra, cuando el avión empezó a hacer movimientos extraños que me asustaron más de lo que ya estaba, enseguida comprobé que todo había sido una torpe maniobra de aterrizaje.
“Ya hemos llegado”
Lo primero que me sorprendió al bajar por la escalerilla, del tren de aterrizaje, fue ver aquellas gentes vestidas como los judíos y romanos del siglo I; me dije, que seguramente estarían celebrando alguna fiesta similar a las nuestras de “ moros y cristianos” o rodando una película.
Me acerque a un hombre, de aquellos vestidos de modo tan peculiar; y le pregunte en inglés, si podía decirme de qué se trataba, me respondió en arameo, yo conozco el idioma pues soy catedrática de lenguas semíticas; ya extintas, así como de latín; y aquel era un arameo puro, la lengua que había hablado Jesús, hice una comprobación con un “ romano” haciéndole una pregunta en latín, que lógicamente me respondió correctamente, y otra en inglés; a la que no sólo no me respondió palabra, sino que me miro, como si pensará que estaba bebida, y ya no podía articular palabras.
Por un momento me sentí desconcertada; pero luego; pensé, que seguramente, se estaría rodando, una película al estilo de la Pasión de Gibson, y que seguramente el actor .romano; no me había respondido a mi pregunta en inglés, porque no hablase inglés, sino cualquiera de las otras lenguas del mundo; una ojeada rápida al entorno, el descubrir que no había cámaras de rodaje; me hizo, darme cuenta, de algo, que mi mente científica, no podía aceptar, estábamos en la Judea de los tiempos de Tiberio, ¿cómo había sucedido? No lo sabría explicar.
Las gentes se veían nerviosos iban y venían atropellándose unas a otras sin cesar; pronto, descubriría el motivo de todo aquel movimiento.-
Un muchacho joven, contaba a un grupo de mujeres.
“Han detenido al Rabi, le quieren condenar a muerte, y sólo hace el Bien, de pronto, el adolescente, fue interrumpido, por hombres maduros, vestidos como los fariseos y saduceos, que decían que era un blasfemo, que hasta había tenido la osadía de hacerse llamar “ Hijo de Dios””
Comprendí que hablaban de Jesús, así que decidí, mezclarme en el grupo, y de ese modo, llegue hasta el Pretorio. ¿qué hacer, que decir?, ¿quién era yo; para intentar salvarlo; salvar, al Salvador?
Absurdo, ¿pero sería licito intervenir en el plan de Dios?; al fin y al cabo hará al Redención, por mucho que se entrometa el ser humano, en este caso yo; así que pedía hablar con Él y decirle lo que iba hacer
Me llevaron hasta Jesús, me conoció; sabía de donde procedía; mentiría si dijese que no me extraño; me miró fijamente con sus ojos casi ciegos por su propia sangre. Y con una voz, dulce, pero muy varonil y muy fuerte, mandándome, no rogándome me dijo
“ No quiero que pidas por mí; yo muero porque quiero”
¿Pero Señor, balbucí, yo, sé Quien eres; y no puedo consentir la injusticia que se va hacer contigo?
Sus ojos brillaron con un punto de Ira, de dolor, trago saliva, respiro un momento, pues se ahogaba por momentos, tan atroz era la tortura a la que lo habían sometido y me dijo de nuevo
“Qué sabes tu de injusticias, quieres impedir ahora mi muerte; que sabes acaba en Vida, pero no has tenido reparo en tu tiempo; en prometer dinero, para que yo sea destrozado”
No entendí lo que quería decir, es cierto, que yo no era una católica muy devota de imágenes, y acostumbrada a visitar iglesias, pero tampoco, era una iconoclasta, así, que, se lo hice saber.
“ Señor, lo siento, no entiendo lo que dices, yo jamás rompería, ni dejaría romper una imagen tuya”
Volvió hablar
¿Una imagen, te refieres a un pedazo de yeso, o de madera, imágenes, de las que a veces hacéis ídolos; no yo no hablo de una imagen de esas, hablo si, de una imagen, pero de una imagen viva, hecha por mi Padre; de un ser humano, ¿vas entendiendo lo que te digo? Tú has prometido dinero para un aborto.

“ Bueno, Señor, es un caso, muy grave, se trata de una mujer una niña casi, y, no llega a los dos meses, ya sabes, no esta animado”

Me respondió muy enojado

Sólo Dios sabe cuando se anima el ser humano; pero todo hombre sabe, que lo que no esta vivo no crece, y, que si esta vivo, y, es humano a fuerza esta animado, un embrión de un mes, era Yo, la primera vez, que me llamaron Señor después de mi Encarnación, me lo contó; Mamá, Yo, como es lógico, no me acuerdo, entonces no tenía memoria, voy a pedirte un favor, “ no me mates en tu tiempo” recuerda que lo que hagáis a uno de mis hermanos me lo hacéis a mí “

Caí de rodillas y le prometí obedecer; Él puso su Mano sobre mi, frente, luego, me levanto, y me dio un beso fraternal y divino en la mejilla
Salí del pretorio, y, baje corriendo las escaleras, se me introdujo un tacón, en un hueco, y, rodé escaleras abajo
De repente oí una voz, que no me era desconocida, la de Juan, uno de compañeros de viajes
“Vamos despierta”
¿Qué pasa?
Caíste por las escaleras
Sí, lo sé, fue por mirar para Pilatos
¿De qué hablas? Tú no estas bien, te afecto el golpe, amiga, que estamos en el 2013, no en el 33

No respondí, tome mi móvil, e hice dos llamada, una anulando una transferencia bancaria, con la que  pensaba pagar el aborto de la joven; la segunda fue a la joven que iba ser madre; brindandome, como "madre  y, abuela"
Cuando conté lo sucedido , me dijeron que fue un sueño; no lo sé, es posible, pero, es cierto que lo que hacemos a los demás se lo hacemos a Él


Fin

Oasis


Oasis
Alzo la ojos a un cielo abrasador, miro a su amigo, en la misma situación que él,intento humedecerse los labios con su propia saliva, pero su boca estaba seca,el sol caía sobre sus espaldas como el látigo de un verdugo, vagamente recordaba, lo que habia sucedido, se había perdido en el desierto, por culpa de una tormenta de arena, no sólo otro que pronto se hizo su compañero, su confidente, al que contó sus miedos, y, del que escucho, también sus temores, se habia perdido con él, y, con él pensó, moriría, la sed era ya, inaguantable; nada podía hacer, varios espejismos, habían aumentando, aún más si cabe su tortura.
De pronto, lo vio, un pequeño río, vegetación, si por fin, podrían beber, y, seguramente algún beduino del desierto, gente buena, noble, y hospitalaria, les daría alojamiento y, comida en su tienda;tocó el brazo de su amigo; mira, ahí esta, “un oasis” vamos, pero el otro, no se movió,“no voy, será como antes, un espejismo,estamos ya, con locura colectiva, cuando llegues, sólo encontrarás arena, y, morirás”no, podía creerlo, y, replicó
“No vamos, estoy seguro que es un oasis, pero aún si no lo es, debemos intentarlo, tenemos que luchar por nuestra vida, si no lo es, moriremos es cierto, pero aquí también, por lo menos no morir sin intentar vivir”
El amigo se negó,se despidió de él; y, fue arrastrándose, por la arena, como un animal, más que como un hombre, hasta que pudo meter su cara, en el agua cristalina, bebió, hasta que no pudo más, luego lo introdujeron en una tienda, hablo de que tenía un compañero, y, fueron a buscarlo, lo encontraron ya muerto, si no se hubiese rendido, si hubiese mantenido la esperanza, y, le hubiera seguido, estaría vivo como él, pero se dejó vencer por los anteriores fracasos,y, el oasis, entonces no era un espejismo
Fin

viernes, 24 de mayo de 2013

La locura de Dios


Cuando aún no había tiempo, pues Dios, Padre, Hijo, Espíritu Santo,  nuestro Dios, el Dios, Uno, y, Trino, aún no lo había creado, para sus creaturas,  que tampoco existían, Dios no tiene tiempo, ni lo precisa, para Él, siempre es Hoy.


Y, Hoy,  porque este es el tiempo de Dios, aunque para los señores científicos,  y, para todos los pobres mortales,  hayan transcurrido, millones de años;  Dios tuvo una idea, dijo:

 Vamos a crear al hombre, al ser humano. Lo crearemos para llenarlo de nuestro Amor. Esto lo dijo el Padre: y, añadió


Lo haremos semejante a nosotros. Lo haremos hijo de Dios. Y, para que se sienta feliz. Crearé para él la luz, para que no tropiece al caminar. Haré los océanos. Y, así paso a paso. El Creador fue describiendo; cada una de las criaturas que iban a salir de sus manos.
Incluyendo los ángeles. Y, luego al final lo que crearemos a él, pero no haremos uno sólo lo haremos pareja. Lo haremos compañía, para que sea mejor semejanza nuestra, encomendaremos a los ángeles que lo custodien. Pues para eso. Los hemos creado.

Hablo el Espíritu Santo, y, dijo, el ser humano. Rechazara nuestro amor. Se revelará engañado por un ángel que también se rebelara, pero yo tomaré posesión de otros hombres. Que nacerán de aquel. Y, les hablaré del Amor que sentimos por él. No harán caso.

Entonces hablo el Hijo. No sólo no harán caso. Sino que mataran a aquellos hombres. La muerte será una criatura, horrible, introducida por el ángel rebelde. Pero yo la venceré, Tú, Padre me mandaras a la Tierra, y, Tu Espíritu Santo. Me ayudaras a hacerme hombre. A convertirme en criatura, en el seno de la criatura humana más santa. Que sólo nosotros podremos crear. Yo elevaré la dignidad del hombre. Ser hombre, será lo más grande, porque Yo Dios seré hombre. Naceré pobre. Trabajare. Seré perseguido, anunciaré a los hombres. Lo mucho que Dios;  los ama. Y, les contaré, que no somos un Dios solitario, que siendo un solo Dios, somos 3 Personas; unidas por el Amor.

Ellos me mataran aunque no todos. Pero si serán la rebeldía: de todos,  la causa de mi muerte, pero Tú Padre. Yo, y, Tú Espíritu Santo, volverán la vida a mi cuerpo mortal, hecho ya cuerpo en todo digno de Dios. Volveré a la Casa, de donde como Dios aunque parto me quedo. Y, me sentaré como Hombre a tu Derecha Padre. Traeré en mi Cuerpo humano mis heridas, mis lágrimas. Y, mis risas. Pues en mi, Dios va llorar, y, reír. Y seré Mediador de mis hermanos. Tú Espíritu Santo. Serás el Alma de la Comunidad de hombres creyentes en mí, que dejaré en la tierra. Y, que se alargará al Cielo. Se llamara Iglesia Católica.

Con todo eso es poco para esa criatura llamada ser humano. A la que sin haber creado tanto queremos. Por eso, con tu Permiso Padre. Me quedaré con ellos. Oculto en un pedazo de Pan, y, en una gota de vino. Allí escondido como Hombre, y, como Dios esperaré me vengan hablar, a oír.

Hablo el Padre. Se burlaran de Ti. Emmanuel. Te insultaran, hasta profanaran el Pan en el que te escondes. No te reconocerán, como no te reconocerán en los otros hombres.
Muchos de esos hombres a los que vamos a crear, dirán que Dios no existe. Y, a veces será por odio. Otras porque otros hombres, nos oculten.

Sin embargo. Nuestro Amor es un Amor divino. Como ya amamos a ese desagradecido ser humano. Vamos a darle la vida. Para que existiendo pueda gozar del Cielo.

Y, dijo El Padre. El Hijo, y el Espíritu Santo. Hágase la Luz y la Luz fue hecha...; y después en un proceso que para los científicos duro miles de millones. De años, pero que para Dios. Como no existe tiempo. Duro menos que un segundo, fue creando el mundo. Y, todo se cumplió como Dios lo había previsto. Y. se hizo el Hijo, Hombre, y fue despreciado y crucificado. Y. resucito. Volvió al Padre, y envío el Espíritu Santo, para vivificar su Iglesia. Y, se quedo en La Eucaristía.

Todo ello prueba la locura de un Dios –Amor. Porque nosotros a Dios no le hacíamos ninguna falta. Pero el Amor no entiende de razones. El Amor si es Amor siempre esta loco. Y. esta es la locura de Dios.

Fin